Siempre llega el momento de despedir el año y este 2021 ha sido realmente bueno. En primer lugar, debo agradecer a mi mujer y a los amig@s todo ese gran apoyo en cada una de las ideas locas que pasaban por mi cabeza, ya que sin ellas no terminaría este año de una forma tan positiva.
Hace un tiempo pude publicar una entrada sobre mis pasitos en Twitch, con el que aprendí como funcionaba la plataforma y, de paso, intente darle un giro al hobby. La cosa no acabó del todo bien y tras estar tiempo editando los directos en diferidos, volví a pillarle el gusto a eso de la edición de vídeo.
Gracias a la insistencia de mi mujer en darle uso a la capturadora antes de venderla y que una amiga no podía disfrutar del Kena Bridge of Spirits, decidí ponerme a grabar el juego con mis jugosos comentarios vergonzosos de fondo. Todo eso sucedió el pasado mes de Septiembre y desde entonces, han pasado muchísimas cosas…
El blog sigue evolucionando y, gracias al paso por Youtube, he podido ampliar mi abanico de posibilidades con nuevas colaboraciones entre desarrolladoras y distribuidoras en forma de análisis o impresiones. Aún me cuesta creer que tras empezar esta pequeña aventura casual a finales de 2017, haya podido conocer muchísima gente y apoyar algunos lanzamientos actuales, incluidos los VR.
Aún tengo que aprender mucho más de esta aventura en solitario, ya que siempre se van dando pasitos pequeños. Tras cerrar mi extinta web de Rincón del Jugón, me dije a mi mismo que no volvería a meterme en algo de esas magnitudes, por lo que meses después abrí este blog.
No me cansaré de repetir que aquí nunca se encontraran noticias de juegos actuales en forma de notas de prensa, ya que este blog sigue fiel a sus raíces y los artículos van a estar a la orden del día si la inspiración llega.
Aún así, tengo que admitir que estos últimos meses se ha invadido de bastantes análisis y los artículos se han visto desplazados. Algo que en el fondo no me gusta porque es mi seña de identidad, así como la del nacimiento del blog.
Ando dándole muchas vueltas a darle un cambio de aspecto para dar frescura y visibilidad a cada artículo, pero me sigo agarrando a la nostalgia y al cariño que le tengo al diseño actual. Ya veremos que sucede en 2022, pero estoy bastante contento con lo que se asoma por el horizonte.
De todas formas, he tenido ayuda y el esfuerzo no ha sido todo mío. Tengo que agradecer el gran trabajo de Amanda Collado, José Miguel Pérez, Antonio Lozano y al gran Alejandro por intentar dar su granito de arena con los análisis, ya que sin ellos esto tampoco habría salido adelante. La locura habría invadido mi vida…
No suele ser fácil ponerse delante del teclado, pero si algo te gusta, hay que intentarlo. Los videojuegos son una parte esencial de lo que soy y me han ayudado en algunos momentos de mi vida a seguir adelante. Soy un niño grande que sigue disfrutando de las maquinitas, una personita que hace oídos sordos cuando le dicen que estas cosas son para críos y un adulto que busca su espacio para desconectar y vivir grandes aventuras. ¿Lo bueno? Que por fin pude casarme con mi Player 2, mi fiel compañera de aventuras y apoyo en esos mundos perdidos. Pudimos celebrar nuestra boda el pasado mes de septiembre, tras casarnos en 2020 en una situación complicada por el Covid, pero… Será una historia digna de recordar.
En fin, a lo tonto la cosa se me ha alargado bastante y puede que alguno se haya dormido. Bueno… No sé que más decir, pero os deseo mucha salud y suerte para el próximo año, ya que aunque siempre tengamos objetivos en mente, la vida siempre nos lleva por otra parte.
¡¡Feliz 2022 y que el vicio os acompañe!!