Este mes esta siendo muy nostálgico y más por todos esos jueguecitos con licencias de series infantiles. Aún recuerdo cuando el mini Rober se ponía a merendar con sus sándwich de nocilla viendo Los Pitufos o Marsupilami, aunque este último era más en los programas de las mañanas. La cosa es que si hace poco tuve lagrimitas en los ojos por disfrutar de un juego de los Pitufos, también he tenido mi momento con el nuevo lanzamiento de Marsupilami Hoobadventure.
¿Quién nos iba a decir que a estas alturas saldría un juego de Marsupilami? Nadie, pero nadie a quién preguntes, así como de los Pitufos, pero mira, parece que a nuestros amigos de Microids se les ha encendido la bombilla y han decidido lanzarnos confeti de nostalgia.
De todas formas, no estamos aquí para hablaros de las series de animación de mi infancia, sino de un jueguecito plataformero que me ha sorprendido muchísimo.

Marsupilami Hoobadventure nos pone en la piel de Punch, Twister y Hope, los cuales deciden abrir un misterioso sarcófago para sorprenderse con un fantasma ancestral. Por desgracia para nuestros marsupiales, este fantasma es algo malote y decide tomar el control de todas las especies animales de Palombia. Ahora bien, los marsupiales no van a quedarse quietos y su misión, si deciden aceptarla, será desbaratar sus malvados planes.
Tras esta breve introducción a su historia, tengo que recalcar que es un fantástico plataformas 2,5D bastante asequible para toda la familia, ya sea para los pequeños, como para los más grandotes de la casa.
Su jugabilidad es bastante directa y simple, sin apenas complicaciones para todo amante de los juegos plataformas. La cola de Marsupilami da una mayor movilidad a la hora de desplazarnos por el escenario, como de defendernos de los enemigos. Tendremos a nuestra disposición un sprint continuo de aceleración gracias a la cola con la que arrollar enemigos, así como alcanzar grandes distancias. El resto de movimientos como el salto encima de los enemigos y el apoyo en los laterales de los escenarios para impulsarse, es algo que ya hemos visto anteriormente, pero lo que más llama la atención es como la desarrolladora ha aprovechado la cola para sorprender en cada uno de los niveles.

Marsupilami usará su cola atacar a los enemigos como si fuera un puño cargado, salto y caída con fuerza en forma de torbellino y la habilidad de poder colgarse de algunos bloques para seguir avanzando. De todas formas, es una jugabilidad ya vista en anteriores plataformas, pero aquí toda la mezcla funciona de forma positiva.
Hay saltos fáciles, difíciles y que nos pondrán en apuros llegando a la última isla, siendo algo simple de inicio, pero efectivo.
Lo bueno es que todo esto se acompaña con un diseño de niveles de lo más original y con una curva de aprendizaje bastante buena. No solo tendremos que completar los niveles, sino que habrá una serie de coleccionables, en forma de plumas, que tendremos que intentar conseguir, así como fases de bonificación que completar. Ambos son necesarios para conseguir el 100%, pero el último desafió será completar todos los niveles en el modo contrarreloj.
Los enemigos no serán demasiado complicados una vez nos aprendamos su pauta, pero hacen su trabajo de complicar el avance a partir de la segunda isla. Ya en los jefes finales por isla, preferiría llamarlo “rondas”, ya que es nuestra amigo/vecino fantasma ancestral quién se encargará de hacernos las cosas complicadas. El avance de dichos niveles será de ir sorteando obstáculos hasta llegar a nuestro amigo fantasmal, pero con un pequeño “pero”, no puedes detenerte en ningún momento.

Por último, Palombia posee tres islas con unos 20 niveles, los cuales se podrán completar entre 3-5h, dependiendo si quieres sacar el 100%. Es una pena que tenga tan poca duración, ya que me hubiese gustado alguna isla más o algún desafío extra. Nos quedará disfrutar de la galería de imágenes que se irá desbloqueando con el tiempo y las contrarreloj.
En el apartado técnico nos encontramos un motor Unity con buen rendimiento que mueve con soltura los niveles en Nintendo Switch, aún con alguna pequeña bajada de fps. Por lo demás, cada uno de los niveles se diferencia perfectamente con un apartado artístico resultón y llamativo, un uso de la iluminación notable y unos efectos simples en los enemigos. Lo que si llama la atención es el mimo en los marsupiales por como se mueven, al tener unas animaciones bien trabajadas y donde más se nota el cariño de la desarrolladora.
En el apartado sonoro encontraremos una banda sonora muy simpática y que se adapta en cada uno de los niveles. Lo bueno es que invita a escucharla con tranquilidad en algunos niveles más calmados.

En conclusión, Marsupilami Hoobadventure es un plataformas 2,5D notable, accesible y divertido. Una pena que no sea más largo y tengamos que aguantarnos con tres islas, pero invita a rejugarlo por su gran jugabilidad. Mi enhorabuena al estudio y espero que sigan mejorando la formula en próximas entregas, a menos que decidan animarse con otra licencia. Lo que trae Marsupilami Hobbadventure lo hace bien y eso es lo que importa a estas alturas, ya que existen otro tipo de plataformas que abusan de la dificultad y se hacen más tediosos cuando no es el objetivo principal.
Marsupilami Hoobadventure ya se encuentra disponible en Nintendo Switch, Play Station 4 y Xbox One, siendo distribuido en España por Meridiem Games.