Muchas veces intentamos desconectar con otro tipo de juegos y más cuando nos gustan los sandbox, pero llega un punto en el que necesitamos algo diferente. Sayonara Wild Hearts lleva mucho tiempo entre nosotros y son pocas las cosas que os pueda decir sobre el título, pero al menos se ha lanzado en formato físico en nuestro país de la mano de Meridiem Games, por ello… se merece un pequeño análisis.

Sayonara Wild Hearts nos mete de lleno en un juego musical con niveles totalmente diferentes y en el que nos encontraremos diferentes tipos de juegos o más bien, guiños. Su narrativa es algo criptica y cuesta pillarle el punto desde un inicio, pero al final, lo único que importa es que a la protagonista le han roto el corazón y poco a poco tendrá que superarlo.

Sayonara Wild Hearts, editado por Annapurna Interactive y Simogo, es un videojuego que podría pasar como un álbum de música electrónica interactivo. A fin de cuentas, es un videojuego y tendremos que acostumbrarnos a la jugabilidad de cada uno de los niveles.

En total encontraremos 20 niveles llenos de temas musicales y con diferentes tipos de jugabilidad. A veces nos encontraremos corriendo a lo largo de plataformas, otras en moto, coche, usando un skate o flotando en el aire.

Lo más sorprendente es lo bien medido que se encuentran los niveles con los temas musicales, encontrándonos un espectáculo audiovisual de lo más atractivo y atrayente.

En lo que se refiere a la jugabilidad, habrá niveles en el que vayamos desplazándonos sobre raíles, en otros una conducción a lo largo de unas pistas y por otra, disparando como si estuviésemos en el Space Invaders a todo lo que nos encontremos por delante, pero al final… siempre encontraremos una serie de jefes finales basados en los signos del zodiaco.

Cada uno de esos jefes finales ira aumentando la autoestima de la protagonista, teniendo enfrentamientos vía QTE, robots gigantes, carreras ilegales, etc.

Por lo demás, en cada uno de los niveles tendremos que ir recogiendo una serie de corazones para aumentar nuestra puntuación, llegando a ser un pique continuo si repetimos cada uno de los niveles. ¿Repetimos? Claro, porque realmente el juego posee una duración de una hora de forma aproximada y es en las mejores puntuaciones donde se explota el juego, repitiendo y repitiendo, encontrando todos los secretos posibles.

En el apartado gráfico encontraremos un juego realmente fluido y con un espectáculo audiovisual que impresiona. Igualmente depende de muchos factores, ya que existen niveles en el que ira variando la iluminación, colores, partículas en pantalla, etc. que puede llegar a agobiar, por lo que recomendamos que haya un periodo de adaptación.

En el apartado sonoro encontraremos un álbum que se mezcla perfectamente con el ritmo e interacción con el jugador, muy recomendable para todo el que le guste la música electrónica entre otras cosas.

Para finalizar, el juego se encuentra con textos y subtítulos al castellano, algo que se agradece para poder entender algo la narrativa, doblada con voz en off por Queen Latifah.

En conclusión, Sayonara Wild Hearts es un juego con un apartado audiovisual excelente y una banda sonora que se deja escuchar, siendo un álbum bastante escuchado en Spotify e incluso han lanzado algún que otro vinilo. Su duración, siendo algo corta, es lo de menos si decidimos desbloquear sus secretos y mejorar las puntuaciones, por lo que su precio de 30-35€ en físico es de lo más atractivo. ¿Estás preparado?